Localizada una quinta fosa en el Marrufo, detectados 9 cuerpos en la fosa 4 y análisis de signos de violencia en los de la 3

A unos 30 metros de la zona de actuación principal del campo de trabajo arqueológico de la finca del Marrufo se ha localizado una quinta fosa que actualmente está en proceso de excavación y en la que se han desvelado restos de un cuerpo humano, según informó la asociación de famliares de las víctimas en un comunicado difundido el 17 de agosto de 2012. Esta nueva sepultura clandestina se suma, pues, a las cuatro que habían sido detectadas hasta ahora desde el inicio de esta excavación, el pasado 2 de julio, en este cortijo privado del término de Jerez de la Frontera (en el límite con los de Ubrique, Algar, Jimena y Cortes), donde a comienzo de noviembre de 1936 se instaló un destacamento militar de fuerzas sublevadas contra la República. La aparición de esta quinta fosa estuvo precedida del hallazgo de dos casquillos de munición cuya presencia en esa zona condujo a un majano de piedras cuyas dimensiones y disposición hicieron suponer la existencia de otro nuevo enterramiento clandestino. El arqueólogo responsable de esta excavación, Jesús Román Román, miembro de la Asociación Papeles de Historia, manifestó que “la confirmación de la existencia de esta nueva sepultura hace suponer que el área de dispersión de las fosas comunes podría ser mayor que la que en un principio se había estimado”.

Trabajos de localización de los restos óseos de la fosa número 5 del Marrufo.
Trabajos de localización de los restos óseos de la fosa número 5 del Marrufo.

Según este arqueólogo, “estamos en presencia de fosas con pocos cuerpos y poca profundidad”, debido en parte a la dureza del terreno. De esta característica general,cabría deducir, en principio, la hipótesis de que la dinámica de los verdugos, que dispusieron de varios meses y un amplio terreno para ejecutar los fusilamientos, siguió la pauta de la apertura diaria y sucesiva de fosas que inmediatamente tapaban. Por esta razón, no cabe descartar el supuesto de que “todo el perímetro de la zona principal de actuación arqueológica podría contener nuevas fosas”.
Por otra parte, en la fosa número 4, en proceso de delimitación, se han detectado restos óseos que podrían corresponder a un mínimo de nueve cuerpos. Esta fosa se encuentra en disposición paralela a la número 1, ya exhumada y en la que aparecieron diez cuerpos.
Por su lado, según datos aportados por el antropólogo físico Juan Manuel Guijo, en la fosa número 3 han sido identificados ocho esqueletos adultos cuya edad se precisará tras su exhumación. De estos ocho, tres son esqueletos femeninos claros, y otros dos también podrían corresponder a mujeres, pero este último dato está a expensas de un estudio detallado en los próximos días. De estos ocho cuerpos, dos aparecen en posición decúbito supino, tres en decúbito prono, dos en decúbito lateral y uno en transición entre decúbito supino y lateral. En cuanto a su orientación, estos ocho tienen alineación este-oeste, con los cuatro sujetos de la zona occidental de la fosa con el cráneo al oeste y los cuatro sujetos de la zona oriental con el cráneo apuntando al este.

Signos de violencia
Siete cuerpos de esta fosa 3 resentan posibles evidencias de haber tenido las muñecas atadas. Juan Manuel Guijo lo explica así: “En siete de los ocho sujetos las manos aparecen fijadas en la zona de la muñeca, palma contra palma o muñeca contra muñeca. En cuanto que no es factible explicar semejante posición como producto de alteraciones postdeposicionales de tipo gravitacional o a causa de otro factor ambiental cabe hablar de una fijación predeposicional en forma de ataduras”.
Estas evidencias de la violencia sufrida por las víctimas enterradas en la fosa 3 son detalladas por el antropólogo físico: “una fractura perimortem del húmero, con fragmentación en numerosas esquirlas, a causa de un posible impacto de proyectil y acortamiento del hueso en relación al antagonista, dentro de una completa preservación de las conexiones anatómicas; una fractura perimortem del fuste de un fémur, con conminución del hueso, con probable origen en el impacto de un proyectil y acortamiento del hueso en relación al antagonista, dentro de una completa preservación de las conexiones anatómicas; una fractura de cadera, con acortamiento del miembro (caso dudoso en tanto no se produzca la exhumación); y daños craneales cuya atribución final a impactos de proyectil habrá de cerificarse tras la exhumación”.
A este respecto, el presidente de la Asociación de Familiares de Represaliados por el Franquismo de la Sauceda y el Marrufo, Andrés Rebolledo,, manifestó que “estas evidencias de signos de violencia indican la alevosía con la que los verdugos asesinaron a estas víctimas inocentes”.
Asimismo, Rebolledo destacó la labor que están desarrollando los voluntarios que están colaborando en este proyecto de exhumación y recalcó “la delicadeza y el respeto” con el que están tratando los restos óseos en las labores de limpieza, selección y preparación para su estudio científico. De igual modo, agradeció las muestras de apoyo e interés mostradas por familiares de las víctimas que cada día acuden al Marrufo para conocer el desarrollo de estos trabajos y para aportar datos sobre su experiencia personal y sobre sus allegados fusilados.

Proceso de limpieza de los cuerpos aparecidos en la fosa número 3 del Marrufo.
Proceso de limpieza de los cuerpos aparecidos en la fosa número 3 del Marrufo.

 

En otro orden, Andrés Rebolledo informó del inicio de las labores de limpieza de la maleza del interior y del exterior del antiguo cementerio de la Sauceda, donde se proyecta realizar el entierro digno de las víctimas cuyos cuerpos se exhumen. Sobre este asunto, señaló que la Delegación provincial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Málaga ha emitido un informe favorable para la autorización de las obras de reparación de este recinto, que está a expensas de la firma final del delegado. Asimismo, explicó que la asociación que preside está realizando las gestiones administrativas pertinentes para conseguir la autorización del Ayuntamiento de Cortes de la Frontera (en cuyo término está dicho cementerio, abandonado desde la década de los años sesenta) para el inicio de estos trabajos de rehabilitación.
Finalmente, Rebolledo resaltó que la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía sigue dando los pasos necesarios para la declaración del valle de la Sauceda (en el que se enclava la finca del Marrufo) como lugar de memoria.

Cementerio de la Sauceda
Cementerio de la Sauceda
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