Cuatro carreteras de la red provincial, cuyo mantenimiento y conservación administra la Diputación de Cádiz, han sido abiertas al tráfico tras los cortes ocasionados por el desbordamiento de cauces, según informó dicha corporación el 13 de marzo de 2013. La interrupción momentánea de las lluvias ha permitido que estas vías, localizadas en la Sierra de Cádiz, hayan podido drenar el agua acumulada. En concreto vuelven a estar operativas las carreteras Arcos-Granadilla (CA-5101), la CA-6105 en el paraje de Alberite, la CA-8101 en Sarracín, y la CA-9120 que comunica Setenil y Torre Alháquime.
La Diputación informó: “Los 35 efectivos de las Brigadas de Carreteras de Diputación continúan trabajando, en coordinación con el Servicio de Emergencias 112, señalizando los riesgos de cada comunicación, limpiando el barro y otras materiales de las calzadas, o bien procediendo a cortes de tráfico cuando las vías son intransitables según confirma el responsable de Infraestructuras en la institución provincial, Eduardo Párraga.
Los principales problemas en la red provincial se evidencian en la vega del Guadalete, en concreto en las áreas del término de Jerez afectadas por el desbordamiento del citado cauce.
Las incidencias actualizadas, en lo que a tráfico se refiere, pueden consultarse en el portal web de la Dirección General de Tráfico. (www.dgt.es)”.